lunes, 1 de noviembre de 2010


Todavía recuerdo el aroma a viento en tus mejillas, el olor del verano en nuestra piel.
Todavía me paro frente a tu puerta, todavía te veo sonreír.
Hace ya 800 días, y el recuerdo de esa mirada, esa única mirada que me quitó el aliento, que me quemó por dentro hasta llegarme a sofocar, sigue presente en mi memoria.

Hoy son ya 800 días, y todavía muero cuando te oigo hablar.
Dime hoy, por ser hoy, que me quieres. Dime que pensaste en mí al despertar. Dime que yo también fui tuya, de la manera que tu fuiste mío, al soñar. 
Dime que me quieres.
Aunque solo sea por hoy, dime que me quieres.


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