Yo sólo quiero que me quieras tú

Ahora viene sola pero en realidad no lo está. Puede que esté seria y tenga sueño, pero en los hoyuelos de su cara todavía está dibujada la sonrisa que el le pinta. Con permanente. Puedes leer en cada gesto cuanto le ama. Puedes ver sus ojos brillar cuando lo mira y sus piernas temblar cuando lo besa. Quizás el esté a dos metros de ella, pero aún allí se oyen sus latidos aumentando, su sangre fluye más rápido, y más.. hasta que está tan cerca, que todo se para y ni si quiera puede respirar, entonces lo mira y piensa que ojalá pueda regalarle siempre sus besos mañaneros, abrazarlo fuerte, fuerte hasta casi dejarlo sin respiración, cogerle sus manos grandes y juguetear con ellas, acariciar su pelo cuando está tumbada, cerrar los ojos, y soñar que está en las nubes, ojalá pueda hecharle de menos mucho tiempo más sabiendo que va a seguir siendo suyo al día siguiente y al otro y al otro.. y si puede ser, para el resto de tu vida. Cada noche duerme tranquila porque sabe que si tiene frío él le va a dejar su chaqueta, que si se siente pequeñita el la cogerá a coscos para que toque el cielo y si está triste la inundara a mimos para que tenga que salir a flote.
No creo que nadie nunca pudiera imaginarlos juntos, pero ahora son ellos quienes no se imaginan separados. Porque tú las has elegido a ella, me has elegido a mi y yo quiero ser tuya. Ahora me pregunto ¿Qué sería de mi si no estuvieras tú? y no encuentro respuesta. 
Y es que me gustas así como eres, me gusta pensar en ti a cada momento, encontrarte cuando abro los ojos, tus manos en mi cintura, compartir almohada, caricias en la espalda, pitis, bocados con pasión y la felicidad, la que tu me das. Me gusta.
Sólo quiero ser el lugar donde te escondes de todo lo demás. Para siempre. ¡Te quiero!